Se escucha el conocido sonido de la campanilla de anuncios de la cabina. El capitán está indicando a la sobrecargo que acabamos de pasar los 10,000 pies sobre el nivel del suelo y que por lo tanto es seguro el uso de aparatos electrónicos en la aeronave. Una regla sencilla de seguridad que todos los pasajeros acordamos obedecer implicitamente al momento de abordar el avión. Tiene que ver con el uso del radioaltímetro, los sistemas de navegación y el sistema de piloto automático. Reglas. Dicho y hecho: mediante el altavoz de cabina se anuncia que tenemos permitido usar nuestras laptops. Más se ha tardado la sobrecargo en decir "Ladies and Gentlemen" que en una media docena de personas en sacar sus laptop de su estuche, otros tantos sacan discman, que han cedido su lugar como los walkman lo hicieron, ante los ipod. Yo me apresuro a encender esta chunche y ponerme a escribir algo para el blog, que tan entelarañado está.
Acabamos de tener elecciones presidenciales en México. Digo "acabamos" por que para mí asi es: voté y me fuí. Todo lo que sé ha sido por los fragmentos de noticias que he escuchado y visto en algún canal de TV por cable latino, aquí en los E.E.U.U.
Uno de esos fragmentos me ha llamado mucho la atención: se trata de una entrevista que Joaquín López Dóriga le ha hecho a Andrés Manuel López Obrador. La entrevista fue agresiva por parte de López Dóriga y me ha gustado mucho. Es divertidísimo ver que un reportero tenga las agallas de hacer preguntas difíciles a sus entrevistados. Otra cosa que es divertidísima es casi cualquier entrevista a AMLO pues he llegado a la conclusión de que éste personaje es como el toro bravo, o como la mujer que sabe bailar muy bien: necesita de un compañero fuerte e igual de bueno para lucirse. En el caso del toro bravo, se necesita a un matador que saque a relucir las cualidades bravas del toro. AMLO es igual: si el entrevistador es malo, éste se ocupa en convertir la entrevista en un spot publicitario más rápido de lo que puede decir compló.
La entrevista que ví tuvo como leitmotiv las famosas contradicciones de AMLO: que si quería impugnar la elección, que si antes había dicho que respetaría al IFE y ahora clama fraude, que si ayer era blanco ahora es negro, en fin...
Me ha quedado muy clara una cosa de todo esto: si Calderón y López empataron es solamente por que es tan malo uno como el otro. Punto. Estoy escuchando ya todo tipo de respuestas a esto diciendo que en realidad el bueno es Calderón y que AMLO es un peligro para el país. No simpatizo con AMLO: pienso que es el político más codicioso, mentiroso e hipócrita que he visto. Pero también Felipe Calderón no canta tan mal las rancheras. No lo digo yo, lo dice la diferencia de menos del 1% por la que éste último "ganó" las elecciones.
Esta mañana me entero que AMLO llama a la población a una campaña de resistencia civil pacífica. ¿Quién se cree este amigo, Gandhi? Díganme ustedes, con toda honestidad: ¿Creen que un político de la talla de AMLO pueda emitir una declaración así y sencillamente esperar que se hagan manifestaciones pacíficas? ¿Cuánto dinero se perderá en su "resistencia civil pacífica"? Cuando en campaña el PAN hacía referencias despectivas a AMLO me hacían enojar. Vivimos unas elecciones verdaderamente marranas donde, como dice el tango "Cambalache" de Enrique Santos Discepolo: el que no llora no mama, y el que no roba es un gil.
Ahora resulta que Calderón no tiene autoridad moral, ni política ni nada. Que en nombre de su familia y de todo lo que es bueno y puro debe admitir que es una alimaña asquerosa sin espinazo. Que el IFE es un fraude, que está todo coludido (nótese que inteligentemente ya no dice "compló"). Que AMLO va a salvar a México. ¡Y yo que pensaba que (F)Ox (A.K.A: la chachalaca) era un ególatra! ¡Pero qué cojones de tipo! Me cae gordísimo que haya amenazado con que la estabilidad política del país depende de que se revisen los votos uno por uno. En serio, ¿quién se cree? No creo que eso sea muy patriota. ¿Por que no esperar 6 años, a que Calderón la riegue y que él pueda decir "Se los dije" y que actúe como juez y opositor del gobierno de Calderón?... les recuerdo que así ganó (F) Ox las elecciones del 2000. A mí sus alegatos me suenan a esto: Más les vale que revisen la votación y me declaren ganador, por que si no les va a caer el chahuixtle.
Respetaría el resultado electoral por que sabía que ganaría (no me pregunten cómo, pero lo sabía) y ahora que el margen ha sido tan cerrado dice que no la elección fue una marranada, que Calderón es un pelele... En la entrevista que ví, López Dóriga le dijo a AMLO que por qué quería invalidar la elección. AMLO dijo que lo que quería era contar los votos uno por uno. Sin embargo ahora quiere que se anule la elección. Es curioso su argumento: dice "que se cuente voto por voto, casilla por casilla" por que está seguro de que él ganó la elección. ¿Y si no? Digo, ¿qué va a pasar si otra vez cuentan todo y resulta que no ganó él? Pues tampoco va a estar contento. AMLO es un niño berrinchudo que quiere un juguete nuevo. Pero qué juguete, la presidencia de la república.
Me pregunto si entre la gente que simpatiza con AMLO está igual de asqueada que yo con este tipo de comentarios. Más que lo que diga o haga este señor me preocupa que haya gente que todavía no haya visto que AMLO no tiene cara, que tiene un hambre de poder desmedida e irracional, que está dispuesto a desestabilizar al país con tal de salirse con la suya. Que ha renunciado a convertirse en una oposición seria en el país... más bien es ahora un serio escandaloso.
Cuando estuve en Cd. Juárez, solo un un par de días después de las elecciones, encendí la televisión por la noche para enterarme de cómo estaban las cosas y mi sorpresa fue que la "Alianza por el bien de todos" (¡con ese nombre tenían mi voto, carajo!) iba arriba en el conteo distrital. El pensamiento de que AMLO fuese el próximo presidente me cruzó la mente y me sentí de pronto como un hombre desnudo en una fábrica de salchichas. Llame a mi casa, me quejé, me entró la histeria, pero al final decidí que lo mejor sería aguantarme y resignarme a que tendríamos otro populista como Echeverría. Ni modo. Cuando el PAN comenzó a ganar puntos de nuevo me emocioné un poco. Saqué papel y lápiz y me puse a calcular... la tendencia indicaba que Calderón cerraría a las 8:00 am del día siguiente con una ventaja de 0.51% sobre AMLO. True Story.
Ahora bien, cabe decir una cosa importante: yo no usé el famoso tridente en mi nickname del messenger, ni anduve por ahí distribuyendo emails anti-peje entre mis amistades y conocidos. Si alguno de mis amigos era partidario de AMLO evitaba hacer polémica, incluso cuando me confesaba Felipillo. Mis amigos son adultos -pensaba- y tienen el criterio suficiente como para hacer sus propias desicisiones. Ahora me siento con ganas de escribir un poco al respecto y quisiera la opinión de todos. He dicho.