Tuesday, September 20, 2005

Latrodectus mactans

El sábado pasado me encontraba lavando mi carro cuando tuve un pequeño accidente.

Al pasar el trapo cerca de una de las salpicaderas de pronto sentí como si me hubiera enterrado un clavo en la palma de la mano. Inmediatamente pensé que habría presionado alguna avispa pues además de la punzada sentí algo de ardor. Rápidamente retiré la mano y solté la franela para examinar mi mano cuando de pronto vi, para mi desgracia, a este bicho salir de la salpicadera de mi carro:




Latrodectus Hesperus.


La araña Viuda Negra (Latrodectus mactans) es un arácnido de la familia de las Theridiidae y representa al miembro más grande de las arañas tejedoras de tela con forma de saco (no es albur). Todos los miembros de la especie Latrodectus son venenosos (vamos, para el caso TODAS las arañas son venenosas) y estos incluyen a la viuda café, la viuda roja y la viuda de espalda roja. El nombre de viuda les viene de la creencia popular de que las hembras de la especie suelen comerse al macho después del apareamiento (de hecho, he observado casos en los que se los comen durante el acto... y los amigos estos no paran hasta que la hembra está fecundada... son toda una inspiración). Esta creencia es solo parcialmente cierta, pues aunque las hembras tratan de comerse al macho, la gran mayoría de las veces éste logra escapar. No sucede lo mismo con las mantis religiosas; esas sí son caso de ñoño y mata.

Siempre he sentido gran fascinación y respeto por las arañas. Así mismo he estado enterado de las características de tal o cual araña: el veneno neurotóxico de la viuda negra es 15 veces más potente que el veneno de algunas víboras de cascabel. Ratas.

Inmediatamente procedí a morderme la región de la herida y comencé a succionar el veneno. Pónte hielo, toma antihistamínico, haz una incición sobre la herida para permitir el sangrado, acuérdate de dónde está la araña para después capturarla y mostrársela al médico si es necesario... Repasaba en mi mente las cosas que tenía que hacer al tiempo que entraba apresuradamente a la casa.

Todos hemos visto alguna vez estos bichos: su tono negro brillante contrastado con el reloj de arena rojo en la panza. Algunas tienen franjas rojas que les recorren la espalda. El nombre Latrodectus mactans quiere decir algo así como "ladrón mordelón asesino". Cuando estuve en la sierra huichola, el médico de guardia del centro de salud me decía que la peor cosa que llegaba a tratar era la picadura de uno de estos amigos en los niños pequeños. Decía que en dos casos separados, un niño y una niña de aproximadamente 6 años cada uno, los dos fallecieron de las complicaciones que el latrotedismo les había causado. Sabes que estás jodido cuando te pica una araña si existe una enfermedad llamada como el condenado animal. Ratas y re-contra ratas.

Las cosas podían haber sido peor. Déjenme platicarles sobre mi araña favorita, la Araña Reclusa Parda.

La Reclusa Parda (Loxoceles reclusa) es un bichito pequeño de la familia de las Sicariidae que tiene la peculiaridad de tener el dibujo de un violín en la espalda, razón por la que se le conoce como araña violinista (fiddleback, o violín spider, en inglés). También se le conoce como araña parda y como araña café, cosa que no ayuda mucho a identificarla pues hay miles de arañas cafés.

La araña reclusa parda (Loxoceles reclusa)
nótese el característico "violincito" en el cefalotórax.


A diferencia de la viuda negra, la reclusa parda no tiene un veneno neurotóxico por lo que su picadura no es dolorosa, de hecho solo se sabe que uno ha sido picado hasta 12 horas después del incidente. El problema con este bicho maldito es que tiene un veneno polipéptido que destruye tejidos. Este es otro bicho que tiene una enfermedad llamada en su honor: necrosis arácnida crónica, o loxocelismo. El padecimiento consiste en un deterioro crónico del área circundante a la mordida de la araña. Podría poner en este blog las fotos que me he encontrado en la web. Mejor les pongo la liga a un sitio web donde se muestran los efectos (severos, cabe mencionar) de la picadura de una de estas arañas.

Han de decir ustedes "Antonio, ya me asustaste... ¿cómo reconozco a uno de estos bichos?" Pues muy fácil, verán, hay tres formas:


  1. Contarle los ojos a la araña: las arañas tienen usualmente 8 ojos. La reclusa parda tiene 6 arreglados en pares, como se puede ver en la foto de abajo.
  2. Revisar que tenga el violín en el cefalotorax.
  3. Si es araña y se mueve, no está muerta... písenla.

A aquéllos aracnofóbicos que lean esto tengo algo que decirles: Me he enterado de la existencia de estas arañas en la costa de Jalisco, pero nunca he visto una en la ciudad de Guadalajara (y váya que he buscado) así es que mis amigos tapatíos pueden estar tranquilos. Existen reclusas en Sudamérica y es particularmente famosa la que habita en Chile, la Loxoceles laeta. Para las personas que viven en la parte oriental de los EEUU las cosas no pintan tan bien: existen cerca de 13 especies de Loxoceles ahí. En Canadá tienen algunas especies de esta araña, pero también tienen a la Araña Vagabundo (Tegenaria Agrestes) : en caso de que se estén preguntando... la enfermedad relacionada con esta última araña es el Tegenarismo.


Pues bien, de regreso a lo de la viuda negra: tuve todos los síntomas de envenenamiento por mordedura de esta araña que incluyen náusea, vómito, cefalea, calambres, pleuralgia... parecía yo mujer embarazada. Logré extraer mucho del veneno que me propino la araña y una vez controlada la situación me dí a la tarea de buscarla. Al atraparla me dí cuenta que se trataba de un macho -bastante grande- que seguramente estaría deambulando por ahí en busca de alguna hembra cuando tuvo la mala suerte de toparse conmigo. No fue necesaria la ida al médico, sin embargo sigo con molestias relacionadas al incidente. Ragno maledetto...

Sunday, September 18, 2005

Scarlatti

Siempre se me ha hecho muy curioso que a pesar de que Johann Sebastian Bach, Georg Friderich Händel y Giuseppe Domenico Scarlatti nacieron todos en el mismo año (1685) tienen estilos muy diferentes. Aunque Bach y Händel personifican el riguroso contrapunto alemán y su música es similar (aunque se está diciendo una barbaridad: cualquier buen conocedor sabe que la diferencia entre Bach y Händel es clara como el día y la noche) las composiciones de Scarlatti son aún más distantes.

Domenico Scarlatti, retratado por Domingo Antonio Velasco en 1738.


Giuseppe Domenico Scarlatti (1685-1757) nació en Nápoles y era hijo de otro gran músico: Alessandro Scarlatti. Es indudable que su primer maestro fuera su padre pero se sabe que sus maestros fueron Pasquini y Gasparini. Además colaboró con Arcangelo Corelli y conoció a Antonio Vivaldi y Georg Friderich Händel, con quien se dice que tuvo una pequeña competencia para establecer quién era mejor músico: Händel resultó mejor organista que Scarlatti pero éste último fué mejor en el clavicordio. Se cuenta que muchos años más tarde, Scarlatti hablaba con gran reverencia respecto a las habilidades de Händel.

Domenico tuvo una vida despreocupada, creo yo. Pasó casi toda vida como músico de personalidades como el rey Juan V de portugal y su hija María Bárbara, quién bajo su tutela se convirtió en una clavecinista excepcional. Al casarse ésta última con el heredero al trono español, se llevó a su profe de clavicordio a vivir con ella a Madrid. Ahí, Scarlatti compuso las sonatas para clavicordio por las que hoy se le recuerda.


Scarlatti compuso nada más y nada menos que 555 piezas para clavicordio que se conocen como Sonatas. En ellas, Scarlatti hace uso de recursos muy propios del clavicordio: hay una sonata que requiere la repetición de una sola nota (trémolo) más rápida que he visto; suena casi como el trémolo que hacen las cuerdas. Esto es casi imposible en el piano sin embargo es posible tocar ese tremolo en el clavicordio usando una técnica similar a la que se utiliza para hacer trinos y mordentes.

Durante mi entrenamiento como pianista mi maestro siempre procuró que en mi repertorio estuviera alguna sonata de Scarlatti. Además, su música no era extraña para mí entonces pues mi padre, quién en su juventud fue guitarrista, a menudo tocaba transcricpiones de las sonatas en la guitarra y ponía discos con las interpretaciones del dúo formado por Ida Presti y Alexandre La Goya. En total estudié algo así como 10 sonatas. Recientemente me he dado a la tarea de transcribir las ediciones de mi maestro al formato de Sibelius, el software de edición musical que utilizo.

Este es el resultado de la primera sonata, en formato PDF: Sonata en Re Mayor.

Aquí podrán escuchar el resultado en MIDI del archivo anterior.

En esta
esta liga que es la página de Classical Music Archives dedicada a John Sankey, quien es un buen clavecinista virtual.

Espero que disfruten estas sonatas de Scarlatti tanto como yo.

Sunday, September 11, 2005

Das Musikalische Opfer

Bach tocando para Federico II, "El Grande".


Corría el mes de Mayo de 1747 cuando Johann Sebastian Bach visitó la corte del emperador Federico II ("el grande") de Prusia en Potsdam, donde su hijo Karl Philip Emmanuel trabajaba como músico de la corte.

Cuenta la historia que JSB, ya un anciano para los estándares de la época, fue recibido con gran reverencia por el emperador. Se dice que mientras éste preparaba su flauta para el habitual concierto nocturno, un oficial le trajo la lista de viajeros y al inspeccionarla se detuvo de pronto, levantó la vista y exclamó "Caballeros, el viejo Bach ha llegado". Inmediatamente mandó a a la escolta real buscar al buen Johann Sebastian, a quien encontraron recién llegado a la posada y sin haberse quitado el abrigo.Me imagino el susto que esto le debe haber causado al pobre Bach: ver al montón de gendarmes armados hasta los dientes buscándolo por nombre y apellido. Lo llevaron al palacio sin demora y ahí, Feredico II le pidió que interpretara algo en la adición más reciente a la colección real de instrumentos musicales: un chunche raro inventado por un italiano hacía pocos años atrás llamado fortepiano. El juguete nuevo de su majestad -uno de 15 que compró- había sido construído nada más y nada menos que por Gottfried Silbermann a quien JSB respetaba muchísimo como maestro constructor de órganos.


Hace algunos años, nos reunimos en casa de unos tíos con motivo de los 80 años de su madre. En casa de estas personas (nótese que ya no digo "tíos"; en realidad no considero pariente mío a alguien que nunca había conocido) estaba un primo que en ese entonces era el orgullo de esa parte de mi familia pues podía tocar el piano con gran habilidad, o al menos eso creían. Después de cenar nos dirigimos todos a la sala y ahí el jóven de 21 años interpretó una polonesa de Chopin y alguna cosa acrobática de Liszt (no tengo nada en contra de Liszt, cabe mencionar) en presencia de su maestro de piano, quien era también invitado al festejo y que es un fanfarrón pianista de tercera. El muchacho tocó bien, es decir: no cometió errores técnicos... le faltó intensidad y conocimiento de lo que tocaba. Cuando terminó de tocar, todos lo aplaudían y le adulaban, entonces mi madre, sintiéndo su orgullo atacado, dijo " a ver, Tony: ahora toca algo tú". Mi primo el pianista se volvió a mí, un pobre chamaco de 16 años, y con arrogancia me dijo: "¿y a tí qué te gusta tocar?". "Bach", respondí tímidamente. Esto pareció molestar el delicado genio de mi pariente, a lo que dijo "yo también toco Bach, mira" y comenzó a tocar, chillonamente, el conocidísimo minueto en sol, del libro de Ana Magdalena. Pelmazo: en primer lugar, el minueto no es de Bach, sino de Christian Petzold y en segundo lugar lo estás tocando fuera de estilo, pensé. Visiblemente ofendido tomé su lugar al teclado, me concentré un poco y comenzé a tocar.


En aquél verano de 1742 en que Bach se sentó al piano pidió a Federico II "El grande" un tema para improvisar una fuga. Se cuenta que en 1714, cuando Louis Marchand -organista de Louis XV de Francia- visitó la corte de Sajonia, el rey Ferdinando de Dresde organizó un concurso de improvisación entre éste y su jóven organista, Johann Sebastian. Marchand accedió y gracias a ello ocurrió el incidente que ha hecho que hoy día recordemos a este organista francés: No lo recordamos por sus dotes musicales, sino por gallina. La tarde previa al día del concurso, Marchand entró tramposamente a escuchar a Bach practicar para el duelo en una capilla. Nuestro amigo francés dijo: patitas, ¿pa' que las quiero? y nunca se presentó a la cita. En su hotel se dijo que habiéndose quejado de una dolencia regresó a media noche a casa vía carruaje.

El tema que el emperador dió a Bach es muy, valga la redundancia, Bachiano cosa que me hace pensar en que tal vez el tema en realidad fue compuesto por K.P.E. Bach a encargo de su patrón. Cabe la posibilidad de que el emperador mismo ingeniara el tema pues era un buen músico (Federico II fue un capaz alumno de Quantz, un gran flautista). Sea cual haya sido el caso, Bach improvisó una bella fuga que Federico II elogió y, como todo buen monarca: insaciable y goloso, pidió que expandiera a cuatro, cinco y seis voces. El tema que Federico "el caprichoso" dió a Bach no era muy facilito contrapuntísticamente hablando, por lo que Bach no realizó la fuga a seis voces en ese momento sino que a su regreso a Leipzig, Bach envió con dedicatoria al monarca un juego de fugas, cánones y una trío-sonata (sonata a trío) que hoy conocemos como "La Ofrenda Musical" (BWV1079). La obra se compone de 2 fugas, una a tres voces y otra a seis (¿no que no , Federico "El sordo"?) tituladas ricercar -un antecesor de la fuga- . Esto con el acróstico RICERCAR del latín "Regis Iussu Cantio Et Reliqua Canonica" (El tema real realizado a la manera antigua canónica) además de los 10 cánones ya citados y la sonata para Flauta (el instrumento del rey) violín
y basso continuo.

Facsímil del ricerar (fuga) a 6v.


Quitándome del coraje que el amigo amartillador de pianos me hizo pasar, comencé a tocar el ricercar a 3 voces de la citada obra. Cuando terminé de tocar recibí una mustia felicitación por parte de mis parientes, pero esto no me importaba: lo interesante era la cara del fanfarrón maestro de piano de mi primo y de éste mismo. Quiso criticar mi interpretación pero no contaba con que conocía bien la obra de Bach, digo bien para tener 16 años y miles de veces mejor que él. Al final de cuentas, cuando me decía que no tocaba lo suficientemente fuerte cierto pasaje... para callarlo le dije "no discuto Bach con alguien que aconseja tocar los adornos fuera de tiempo".



Les anexo aqui una grabación de la citada fuga.

Mis amigos Ingenieros y matemáticos pueden encontrar funciones matemáticas para explicar algunos de los cánones de "La Ofrenda Musical" en esta
liga.